La red social

Llegó la hora de analizar la tan cacareada Red Social, uno de los éxitos del año pasado y candidata a los Oscars 2011. Y de camino, como usuario de Facebook, reconozco que tengo cierta curiosidad…

El argumento

Mark Zuckerberg (Jesse Eisenberg  - Bienvenidos a Zombieland ) es un estudiante de informática de Harvard un tanto excéntrico y no demasiado popular. Tras su último desengaño amoroso, crea una página para conocer chicas del campus en una noche que resulta ser un éxito de visitas, y de este experimento por diversión surge la idea de crear una red social para que la gente pueda simplemente conocerse. Hoy esta red social tiene 500 millones de usuarios y se llama Facebook. Pero, y cito literalmente el cartel de la película, para hacer 500 millones de amigos hay que hacer algunos enemigos.

La crítica

Sin saber a ciencia cierta si lo que nos cuentan es verdad (hay muchos por ahí que opinan que cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia, hay que reconocer que la pareja Fincher (el club de la lucha) y Sorkin (el ala oeste de la casa blanca) saben cómo contar una historia. Bien es verdad que el argumento es bastante jugoso, a saber, la creación del fenómeno social Facebook desde el cual podéis estar leyendo estas líneas (Facebook dentro de Facebook, chúpate esa Nolan), pero es cierto que sin ser una historia emocionante, director y guionista consiguen mantener nuestro interés durante los  correctos 120 minutos que dura la cinta.

Mención especial para Eisenberg, buen trabajo interpretativo que probablemente será eclipsado esta noche por la magistral (dicen) interpretación de Firth en El discurso del rey, como probablemente ocurra con muchas de las categorías en las que esta cinta presenta su candidatura. Y es que también hay que reconocer que aunque la película está bien hecha, tampoco es la octava maravilla del mundo y ni mucho menos merece una bolsita de Oscars. Y es que el hecho de considerar esta cinta para tantas nominaciones es un indicativo de lo nefasto que ha sido el 2010 en lo que a cine se refiere. Eso sí, por mi parte Sorkin tiene mi voto en la categoría de guión adaptado.

Para terminar, mención especial para la música, que acompaña muy bien durante toda la cinta, ayudando a mantener el hilo argumental.

El resultado

Buena película de esas que llamamos de “hablar”. De esas que gusta saborear, como un buen Grisham o un Forsyth.