Blogia
The Movie Blog

Solomon Kane

Solomon Kane

Hacía ya algún tiempo que no llegaba a cartelera una peliculilla de caballeros y aventuras, de  esas que tanto nos gustan. Habrá que decir si Solomon da la talla.

El argumento

El diablo quiere llevarse el alma de Solomon Kane (no para el diablo oiga, que si Constantine, que si el motorista fantasma, ahora el señor Kane) y este no tiene otra cosa que hacer para escapar que abandonar su vida de fechorías para refugiarse en un monasterio. Pero esta paz no dura mucho y el abad le dice, mira, tú aquí no te puedes quedar muchacho, y Kane vuelve a arrastrarse por los caminos en busca de su destino, el cual le alcanza cuando encuentra a una familia que viaja rumbo al nuevo mundo.

La crítica

Nada más terminé de ver esta película me puse a pensar a quién echarle la culpa de semejante cagada. ¿Cómo puede ser que una película que arranca relativamente bien, que tiene un argumento prometedor, pueda fastidiarse al final? ¿De dónde viene semejante incompetencia? Y echando mano del imdb me fijo en dos cosillas sin importancia: peli europea + director inexperto. Claaaro. Ahora sí me lo explico un poco más.

Ya desde el principio se ve que no había mucho presupuesto, o que no se sabía administrar, viendo los efectillos del principio de la cinta, que si bien son pretenciosillos, huelen más a producción para televisión que a película de Hollywood. Pero bueeno, salvando ese inicio un tanto raro, la película remonta el vuelo de la mano de del propio Kane, James Purefoy (Resident Evil) que encarna bastante bien el papel de caballero maldito (y que de alguna forma nos evoca a otro personaje atormentado como es el lobezno de Hugh Jackman, verdad?). A estos buenos propósitos le acompaña un momento de lucidez del perpetrador, digo del director, Michael J Basset (Deathwatch), que tiene a bien conducir el personaje a través de diversos encuentros que animan la cinta y nos tienen entretenidos. Mención aparte para la belleza de algunos escenarios y momentos musicales cortesía de Klaus Badelt (Piratas del Caribe I) que suena bastante bien.

Pues bien, cuando más entretenidos estábamos, el director decide entrar a matar y nos ofrece un final (del que no hablaremos), digno sin duda de producciones de serie C por lo menos. Vamos, casi tan abajo como Dragones y Mazmorras (bueno, no tanto). Y el problema no es sin lugar a duda la falta de presupuesto, o de efectos especiales. El problema es que el final es absolutamente lamentable, mal planteado y ejecutado, echando por tierra el relativo buen hacer de todos los minutos anteriores y que finalmente nos dejan esta mala leche con la que escribo estas líneas porque me quedo con la sensación de haber perdido un viernes noche que empezó bien y terminó por los suelos.

El resultado

Si no sabes torear pa que te metes como se dice por estas tierras. Cualquiera que haya visto un mínimo de cine plantea un final mejor que el que podemos ver en la cinta. Un desperdicio.

0 comentarios